Observando a mis gatitos, Bastet y Azabache, me he dado cuenta de la importancia del cuerpo físico (los gatos saben cuidarse como nadie), y he reflexionado sobre la poca importancia que le damos en nuestra ajetreada vida cotidiana. “Mens sana in corpore sano“, decía el poeta latino Juvenal en sus escritos; todos estaremos de acuerdo con esta frase pero.., ¿cuántos la pondremos realmente en práctica?

Focusing no es una técnica nueva: desde los años 60 del pasado siglo lleva ayudando a multitud de personas en todo el mundo a ponerse en contacto con su “consciencia corporal”, para aprender a gestionar mejor sus emociones desde un enfoque completamente físico.
Focusing es toma de conciencia de nuestro propio cuerpo y de cómo nos afectan las emociones. Se trata de un sistema de curación emocional corporalmente orientado, que nos permite “enfocarnos” (de ahí su nombre) para reconocer y luego cambiar la forma en que nos enfrentamos a ciertas situaciones conflictivas en nuestra vida cotidiana.