Meditar es utilizar la mente como una herramienta que trabaja a nuestro favor. Es entrar en un diálogo interno directo con nosotr@s mism@s, calmando la vorágine diaria de nuestras emociones, para sumergirnos en un espacio personal de nuestro mundo interior lleno de paz y tranquilidad.

Reducir el estrés y alcanzar un profundo estado de relajación son tan sólo algunos de los beneficios más inmediatos que podemos obtener gracias a la práctica regular de la meditación. Entre otras cosas, la meditación guiada también nos ayuda a entrar en un contacto más profundo e interno, aumentando nuestro auto conocimiento.

Trabajar con meditaciones guiadas, o con meditaciones tipo mindfulness, o con meditaciones basadas en un enfoque tipo corporal («focusing«) puede ayudarte a tomar conciencia de las necesidades de tu propio cuerpo, mente y espíritu… A gestionar tus emociones, a hacerte sentir mejor o a descubrir aspectos desconocidos de ti mism@.